El origen de Estambul se remonta a la fundación de Constantinopla primero, y anteriormente a la ciudad de Bizancio. Esta última, se dice que fue fundada por Bizas en el año 657 a.C.
La mitología griega habla de Bizas, que era hijo de Poseidón y de la ninfa Ceróesa. La historia dice que Bizas era, en realidad, el hijo del rey Niso, y que era originario de la ciudad griega de Megara.
Según cuenta la leyenda, la fundación de la ciudad de Bizancio, cuyo nombre proviene de Bizas, se produjo tras una visita de éste al oráculo de Delfos. El oráculo le dijo que debía crear un asentamiento en “la ciudad de los ciegos”. Fue así como Bizas partió de la ciudad de Megara con un grupo de colonos, y al llegar a lo que hoy en día es la zona del Cuerno de Oro, pensó que los fundadores de Calcedonia (actual Kadıköy), ciudad anterior a Bizancio, debían de estar ciegos para no ver que el emplazamiento junto al Cuerno de Oro era mucho mejor. Tras esto, decidió fundar la ciudad de Bizancio en el año 667 a.C.